Los principales centros bursátiles festejan el cierre de un año que pese a la fuerte volatilidad que se generó en gran parte de los meses, pero que al final lograron terminar con aumentos de doble dígito por las buenas perspectivas sobre la política monetaria de los bancos centrales para 2024.
Para México, el principal índice bursátil de la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) cerró la última sesión de 2023 con un nivel de 57,406.16 unidades, cerca de su máximo histórico y que le valió para cerrar con un balance positivo de 18.5%. Por otro lado, el índice FTSE BIVA de la Bolsa Institucional de Valores (BIVA) terminó en 1,183.51 puntos, para crecer 16.9% en ese mismo periodo.
En 2023, la BMV ha navegado por aguas turbulentas, reflejando una dinámica de mercado compleja y multifacética. A principios de año, se observó un crecimiento prometedor del 10.3%, posiblemente influenciado por una mejora en la confianza de los inversores y expectativas de cambios en la política de tasas de interés de la Reserva Federal.
Eduardo Ramos, analista de mercados en DVL Trading dijo que este movimiento ascendente indica una adaptabilidad notable del mercado mexicano ante los retos económicos globales. Sin embargo, la BMV enfrentó un revés significativo con la caída del 25.69% en octubre, impulsada principalmente por el desplome de las acciones de los grupos aeroportuarios, debido a cambios en la regulación tarifaria por la Agencia Federal de Aviación Civil; resaltando la sensibilidad del mercado a factores regulatorios y políticas internas.
Además, el analista de DVL Trading dijo que la BMV no estuvo aislada de las tensiones geopolíticas, como el conflicto en Medio Oriente, que impactaron negativamente en los mercados globales, incluyendo México. Estos eventos subrayan la interconexión del mercado mexicano con dinámicas económicas y políticas a nivel mundial. A pesar de estos desafíos, la visión a largo plazo para la BMV sigue siendo positiva. México se mantiene como un destino atractivo para inversiones internacionales, apoyado por su estabilidad económica y expectativas de crecimiento.
«En conclusión, el año 2023 para la BMV ha sido un claro ejemplo de la naturaleza volátil de los mercados financieros, donde los factores locales e internacionales juegan roles cruciales, y la importancia de adoptar una perspectiva equilibrada y a largo plazo en el ámbito de las inversiones bursátiles», agregó Ramos.