Un análisis de la patronal mexicana Coparmex arroja que la extorsión se redujo ligeramente, un 2,4%, en comparación con el año pasado. 50% de las empresas fueron víctimas de algún delito en 2022
Más de 3.400 personas fueron extorsionadas en México entre enero y abril de este año, lo que equivale a más de una víctima por hora, según un análisis de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex). Una de las dos patronales más grandes del país, Coparmex presentó el martes un estudio con base en cifras oficiales del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP) las cuales arrojan que ha habido una disminución del 2,4% del delito este año, en comparación con el mismo periodo de 2022. Pese a la ligera bajada, la media arroja más de una víctima de extorsión por hora.
En los primeros 53 meses de la Administración federal del presidente Andrés Manuel López Obrador, ha habido un incremento de 48% en el número total de carpetas de investigación de este tipo de delito, en comparación con el mismo periodo del Gobierno anterior. Esto representa “la mayor cantidad de carpetas de investigación para un periodo similar de las administraciones pasadas”.
El número de víctimas de extorsión aumentaron en 11 Estados, incluyendo Michoacán, Baja California Sur y Ciudad de México, entidades en donde se vio el repunte más pronunciado. Una de cada dos empresas miembro de Coparmex reportaron ser víctimas de algún delito el año pasado. La extorsión y el delito informático empataron como tercer delito más frecuente para las empresas. Entre los negocios víctimas de extorsión, el 72% fue extorsión telefónica y el 28% fue cobro de piso, práctica común del crimen organizado.
“La extorsión es uno de los delitos que más ha crecido y que está golpeando con mayor fuerza a la actividad económica. Desde a aquel que tiene una pequeña miscelánea o una tintorería, hasta a las grandes empresas“, dijo el presidente de Coparmex José Medina Mora, en una presentación virtual. “Es un delito que debe atenderse y prevenirse para evitar que se normalice”, señaló.
Analistas y especialistas han advertido que la inseguridad es uno de los principales obstáculos para el nearshoring, la tendencia a de empresas trasnacionales por trasladar sus operaciones de China a países considerados “aliados” de Estados Unidos. Empresas que consideren abrir fábricas o plantas en México deben considerar la posibilidad de pagar piso a bandas criminales, un concepto llamado “impuesto criminal”. Este mes, una firma de seguridad llamada Overhaul informó que registró 5.000 robos de autotransporte de carga, lo que implica sustanciales pérdidas para las empresas. Medina Mora dijo el martes que el ánimo para invertir en el país disminuyó entre 2021 y 2022, particularmente entre micro, pequeñas y medianas empresas.
“El 19% de las empresas socias de Coparmex consideraron que la inseguridad es un obstáculo, después de la incertidumbre económica, que es lo que de manera más importante limita las inversiones”, dijo Medina Mora. El 64% de las empresas han aumentado el gasto en medidas de seguridad, agregó. “Insistimos, lo que más nos preocupa es el crecimiento en el número de delitos que están aumentando de la mano del nivel de violencia y de la descomposición social”, dijo Medina Mora, “los mexicanos no debemos acostumbrarnos a vivir con miedo”.
