El Fondo Monetario Internacional (FMI) informó el jueves que aprobó a México una línea de crédito flexible de dos años por unos 35,000 millones de dólares y que tiene la intención de seguir asignándole un carácter precautorio.
El organismo agregó que revaluará el próximo año el panorama de riesgos externos y sus implicaciones para el acceso en el marco del acuerdo, aunque aseguró que el país latinoamericano tiene una «gran solidez» de sus fundamentos económicos.
«La economía mexicana está en medio de una expansión generalizada, con un consumo e inversión del sector privado sólidos», dijo Gita Gopinath, primera subdirectora gerente y presidenta interina del Directorio del FMI en un comunicado.
«Las políticas macroeconómicas y los marcos institucionales de política económica de México siguen siendo muy sólidos (…) México sigue cumpliendo con los criterios de habilitación de la Línea de Crédito Flexible (LCF)», agregó.
La LCF se ha venido reduciendo en los últimos años, desde uno 88,000 millones de dólares aprobados en 2017.