La Agencia Mexicana de Cooperación Internacional dice que usan dinero de dos fondos para evaluación y creación de vacunas contra el Covid-19.
La Agencia Mexicana de Cooperación Internacional (Amexcid) destina 55 millones de pesos de un par de fideicomisos para la evaluación y creación de cuatro vacunas contra el Covid-19, así como para el desarrollo de pruebas detección de la enfermedad que ha paralizado al mundo.
“Los recursos destinados a los proyectos (de vacunas contra el Covid-19) en comento ascienden a 55 millones de pesos mismos que provienen de dos de los fondos de cooperación internacional —Fondo México y Fondo México-Chile— a cargo de la Amexcid”, revela información a la que tuvo acceso Forbes México.
Actualmente se desarrollan 19 proyectos encabezados por Esther Orozco Orozco, miembro del Consejo Técnico del Conocimiento y la Innovación (Coteci) e investigadora del Centro de Investigación y de Estudios Avanzados (Cinvestav), los cuales buscan hacer frente a la actual emergencia sanitaria ocasionada por el brote del virus SARS-CoV-2 en México, dice la entidad dependiente de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE). Estas labores forman parte del Consorcio Mexicano de Vacunas y Tratamientos COVID-19, conformado en agosto pasado.
Al 31 de octubre de 2020, Amexcid no cuenta a detalle cuánto dinero del total de la cantidad destinada fue destinada para cada uno de los 19 proyectos para el desarrollo de las vacunas, plataformas y pruebas para detectar el Covid-19. Lo único que sabe son los nombres de cada uno de los proyectos en manos del Coteci.
Los proyectos financiados con dinero del Fondo México y Fondo México-Chile contemplan cuatro vacunas: vacuna de nanoplásmidos npJS19 del Instituto Gould-Stephano/ITESM; vacuna basada en despliegue de epítopos del Instituto de Biotecnología de la UNAM; vacuna basada en una quimera recombinante multiepitópica de la Universidad Autónoma de Querétaro; y la vacuna basada en el virus de la enfermedad de Newcastle de Instituto de Biotecnología de la UNAM, Universidad Autónoma de Querétaro, Laboratorios Avimex y el Instituto Mexicano del Seguro Social.
Entre los demás proyectos, la investigadora del Cinvestav ayuda también en la creación del sistema de monitoreo del estado de salud de pacientes Covid-19 en hospitales, en la evaluación de vacunas contra el SARS-CoV-2 ante protocolos de inmunización para obtener respuesta inmunitaria en mucosas y en biosensores genéticos de nueva generación.
Con el dinero ahorrado en los fideicomisos y administrados por Amexcid también se trabaja en crear una prueba serológica rápida, barata y de alta sensibilidad para detectar inmunoglobulina IgG Contra SARS-CoV-2 usando nanopartículas magnéticas y microfluídicas y una técnica de detección molecular in sitio, y en producción de antígenos vacunales.
Otros proyectos que son desarrollados con estos recursos públicos son el desarrollo de un kit de RT-PCR de muy bajo costo para detectar el SARS CoV-2, así como la detección de Covid-19 en el binomio madre-hijo en mujeres lactantes.
Los investigadores del Coteci preparan un estudio piloto para comparar cuatro estrategias terapéuticas para Covid-19, así como en otros ensayos clínicos.
La disposición del Consejo es que los recursos correspondientes a la programación 2020, también sean asignados directamente a iniciativas alineadas a la resiliencia de la pandemia, en el ámbito de fortalecimiento de la investigación conjunta en materia sanitaria, así como la recuperación económica social (emprendimiento, brecha digital para comercio electrónico, desarrollo productivo, turismo) y reconstrucción del tejido social (resiliencia, atención a población vulnerable, brecha digital en usuarios de alto grado de marginación social).
El Coteci es un órgano colegiado de carácter consultivo de la SRE que impulsa el conocimiento científico, el desarrollo tecnológico y la innovación como un ejercicio de la política exterior y de las relaciones diplomáticas.
La política de trabajo del Fondo México (conocido como el Fondo Infraestructura para Países de Mesoamérica y el Caribe) es donar y financiar proyectos de energía, transporte, telecomunicaciones, facilitación comercial, seguridad alimentaria, medio ambiente, vivienda y salud para países de Centroamérica.
Al 30 de septiembre de 2020, el Fondo México tenía 281 millones de pesos listos para ser usados en diferentes programas para Centroamérica y para frenar el brote de Covid-19 en la República Mexicana.
El Fondo Chile-México ha sido solidario en diversas situaciones de emergencia que han afectado tanto a Chile como a México. En 2010, a consecuencia del terremoto de magnitud 8.8 y posterior tsunami que azotó a gran parte de Chile, se destinó la totalidad de los recursos de dos programaciones, al desarrollo de proyectos para la reconstrucción. Lo mismo se acordó en 2017, tras el sismo de magnitud 7.1 que afectó a México en septiembre de ese año.
El Fondo Conjunto de Cooperación Chile-México es un instrumento sólido con 12 años de funcionamiento, derivado del Acuerdo de Asociación Estratégica (AAE) entre México y Chile de 2006. El Fondo ha financiado 143 proyectos, con un monto cercano a los 24 millones de dólares (unos 480 millones de pesos).
Fuente: Forbes