La contienda electoral en la Cuauhtémoc se ha visto ensombrecida por un problema inesperado: la acumulación excesiva de basura generada por la propaganda de campaña de la candidata de Morena, Caty Monreal. Los habitantes de la demarcación han expresado su indignación ante la gran cantidad de material publicitario desechado en las calles y han exigido a Monreal que tome medidas urgentes para limpiar la contaminación visual y ambiental que ha generado.
La proliferación de lonas, carteles y volantes con la imagen de Caty Monreal ha inundado las principales avenidas y espacios públicos de la Cuauhtémoc, generando un paisaje urbano saturado y poco atractivo. Esta situación ha llevado a los residentes a alzar la voz y a demandar una respuesta por parte de la candidata y su equipo de campaña.
En este sentido, diversos líderes comunitarios y grupos de activistas han organizado protestas y han lanzado campañas en redes sociales bajo el lema «Limpiemos la Cuauhtémoc», instando a Caty Monreal a asumir su responsabilidad y a retirar la propaganda electoral que ha dejado esparcida por las calles.
La respuesta de la candidata de Morena ha sido crucial en medio de esta controversia. Si bien Caty Monreal ha reconocido la preocupación de los habitantes y ha prometido tomar medidas para abordar el problema, aún no se han anunciado acciones concretas para la limpieza y el retiro del material publicitario.
En un contexto donde la sostenibilidad y el cuidado del entorno son temas prioritarios para la ciudadanía, el desafío para Caty Monreal y su equipo de campaña es responder de manera efectiva a las demandas de los habitantes de la Cuauhtémoc y demostrar un compromiso real con la limpieza y el ordenamiento urbano. Solo así podrán recuperar la confianza y el respaldo de una población que espera soluciones concretas y acciones tangibles en favor del bienestar común.