El impacto de la pandemia del coronavirus en el empleo le podría costar varios años de recuperación a México, de ahí la urgencia de implementar medidas de apoyo específicas en la materia.
El mercado laboral mexicano no ha logrado recuperarse al 100% de la crisis del 2009 y ahora el Covid-19 plantea un nuevo traspié para el empleo en México ¿Cuándo se recuperará? La pregunta está en el aire, pero se puede anticipar una destrucción de plazas más grande que hace diez años, advirtió David Kaplan.
“Con los datos que tenemos, y lo que ha adelantado el Presidente, podemos decir que cuando se den a conocer las cifras de mayo, esta crisis, en cuanto al empleo formal, será más profunda que la crisis de 2009. Estamos entrando de manera mucho más rápida, esta crisis a penas lleva dos o tres meses y la reducción de empleo es verdaderamente dramática. Todavía estaríamos lejos del peor momento de la crisis del 95″, agregó el especialista Senior en Mercados Laborales del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
Durante su ponencia El futuro del empleo en México, organizada por el Instituto Nacional Electoral (INE) y Cátedra Madero, David Kaplan recordó que este tipo de crisis tienden a dejar una huella en el mercado laboral. Actualmente, los más afectados por el desempleo son los trabajadores jóvenes y los que tienen ingresos bajos.
¿Hacia dónde vamos? El especialista del BID detalló que es probable que las contrataciones continúen desaceleradas durante varios años. Por ejemplo, tras la crisis del 2009, expuso, éstas se recuperaron hasta el 2016. “Una crisis que podemos decir de uno o dos años dejó una cicatriz en la tasa de contrataciones, la cual se mantuvo baja por muchos años después”.
Programas de apoyo al empleo
El especialista hizo un llamado a implementar acciones de apoyo al empleo que ayuden a tener una recuperación más rápida de la pronosticada. Medidas como el subsidio al salario de trabajadores formales y cuotas patronales ante el IMSS y un seguro de desempleo son buenas alternativas.
A estas medidas hay que sumar el fortalecimiento del Servicio Nacional de Empleo (SNE) y la negociación colectiva, además de darle un enfoque mayor de creación de empleo formal al programa Jóvenes Construyendo el Futuro a través de incentivos para la contratación permanente de aprendices.
“No debemos conformarnos con una recuperación lenta. En mi opinión, el hecho de que el mercado laboral tardó siete u ocho años en recuperarse, según algunos indicadores, después de la crisis de 2009, y en otros indicadores ni siquiera se ha recuperado, creo que tenemos que ver esa evolución como un problema. Si en el 2022, el PIB está creciendo de manera razonable y otra vez la creación de empleos formales nos parece razonable, pero si la tasa de desempleo sigue siendo alta, si la tasa de contrataciones sigue siendo baja y los ingresos promedio siguen siendo menores que antes de la crisis, podríamos decir que esta crisis no ha terminado”.
El mercado laboral mexicano no ha logrado recuperarse al 100% de la crisis del 2009 y ahora el Covid-19 plantea un nuevo traspié para el empleo en México ¿Cuándo se recuperará? La pregunta está en el aire, pero se puede anticipar una destrucción de plazas más grande que hace diez años, advirtió David Kaplan.
“Con los datos que tenemos, y lo que ha adelantado el Presidente, podemos decir que cuando se den a conocer las cifras de mayo, esta crisis, en cuanto al empleo formal, será más profunda que la crisis de 2009. Estamos entrando de manera mucho más rápida, esta crisis a penas lleva dos o tres meses y la reducción de empleo es verdaderamente dramática. Todavía estaríamos lejos del peor momento de la crisis del 95″, agregó el especialista Senior en Mercados Laborales del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
Durante su ponencia El futuro del empleo en México, organizada por el Instituto Nacional Electoral (INE) y Cátedra Madero, David Kaplan recordó que este tipo de crisis tienden a dejar una huella en el mercado laboral. Actualmente, los más afectados por el desempleo son los trabajadores jóvenes y los que tienen ingresos bajos.
¿Hacia dónde vamos? El especialista del BID detalló que es probable que las contrataciones continúen desaceleradas durante varios años. Por ejemplo, tras la crisis del 2009, expuso, éstas se recuperaron hasta el 2016. “Una crisis que podemos decir de uno o dos años dejó una cicatriz en la tasa de contrataciones, la cual se mantuvo baja por muchos años después”.
Programas de apoyo al empleo
El especialista hizo un llamado a implementar acciones de apoyo al empleo que ayuden a tener una recuperación más rápida de la pronosticada. Medidas como el subsidio al salario de trabajadores formales y cuotas patronales ante el IMSS y un seguro de desempleo son buenas alternativas.
A estas medidas hay que sumar el fortalecimiento del Servicio Nacional de Empleo (SNE) y la negociación colectiva, además de darle un enfoque mayor de creación de empleo formal al programa Jóvenes Construyendo el Futuro a través de incentivos para la contratación permanente de aprendices.
“No debemos conformarnos con una recuperación lenta. En mi opinión, el hecho de que el mercado laboral tardó siete u ocho años en recuperarse, según algunos indicadores, después de la crisis de 2009, y en otros indicadores ni siquiera se ha recuperado, creo que tenemos que ver esa evolución como un problema. Si en el 2022, el PIB está creciendo de manera razonable y otra vez la creación de empleos formales nos parece razonable, pero si la tasa de desempleo sigue siendo alta, si la tasa de contrataciones sigue siendo baja y los ingresos promedio siguen siendo menores que antes de la crisis, podríamos decir que esta crisis no ha terminado”.
El mercado laboral mexicano no ha logrado recuperarse al 100% de la crisis del 2009 y ahora el Covid-19 plantea un nuevo traspié para el empleo en México ¿Cuándo se recuperará? La pregunta está en el aire, pero se puede anticipar una destrucción de plazas más grande que hace diez años, advirtió David Kaplan.
“Con los datos que tenemos, y lo que ha adelantado el Presidente, podemos decir que cuando se den a conocer las cifras de mayo, esta crisis, en cuanto al empleo formal, será más profunda que la crisis de 2009. Estamos entrando de manera mucho más rápida, esta crisis a penas lleva dos o tres meses y la reducción de empleo es verdaderamente dramática. Todavía estaríamos lejos del peor momento de la crisis del 95″, agregó el especialista Senior en Mercados Laborales del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
Durante su ponencia El futuro del empleo en México, organizada por el Instituto Nacional Electoral (INE) y Cátedra Madero, David Kaplan recordó que este tipo de crisis tienden a dejar una huella en el mercado laboral. Actualmente, los más afectados por el desempleo son los trabajadores jóvenes y los que tienen ingresos bajos.
¿Hacia dónde vamos? El especialista del BID detalló que es probable que las contrataciones continúen desaceleradas durante varios años. Por ejemplo, tras la crisis del 2009, expuso, éstas se recuperaron hasta el 2016. “Una crisis que podemos decir de uno o dos años dejó una cicatriz en la tasa de contrataciones, la cual se mantuvo baja por muchos años después”.
Programas de apoyo al empleo
El especialista hizo un llamado a implementar acciones de apoyo al empleo que ayuden a tener una recuperación más rápida de la pronosticada. Medidas como el subsidio al salario de trabajadores formales y cuotas patronales ante el IMSS y un seguro de desempleo son buenas alternativas.
A estas medidas hay que sumar el fortalecimiento del Servicio Nacional de Empleo (SNE) y la negociación colectiva, además de darle un enfoque mayor de creación de empleo formal al programa Jóvenes Construyendo el Futuro a través de incentivos para la contratación permanente de aprendices.
“No debemos conformarnos con una recuperación lenta. En mi opinión, el hecho de que el mercado laboral tardó siete u ocho años en recuperarse, según algunos indicadores, después de la crisis de 2009, y en otros indicadores ni siquiera se ha recuperado, creo que tenemos que ver esa evolución como un problema. Si en el 2022, el PIB está creciendo de manera razonable y otra vez la creación de empleos formales nos parece razonable, pero si la tasa de desempleo sigue siendo alta, si la tasa de contrataciones sigue siendo baja y los ingresos promedio siguen siendo menores que antes de la crisis, podríamos decir que esta crisis no ha terminado”.
México no puede dejar de promover un mejor mercado laboral hasta que los indicadores vuelvan a los niveles que tenían antes de la crisis, puntualizó. Las políticas para preservar el empleo y reactivarlo determinarán la profundidad de la crisis y la rapidez con la que se recuperará la normalidad, sentenció.
