La candidata de la coalición “Sigamos haciendo historia” por la Ciudad de México ha dejado un asunto pendiente en Iztapalapa con los grupos originarios que amenaza su candidatura.
La exalcaldesa de Iztapalapa, Clara Brugada, ha estado inmersa en un prolongado conflicto administrativo con un grupo indígena por la disputa de un cementerio ancestral en el barrio de San Francisco Culhuacán, en el que pobladores indígenas de diversos orígenes étnicos han solicitado al gobierno de la Ciudad de México la entrega del predio para la construcción del mencionado cementerio, conforme a sus usos y costumbres ancestrales.
A pesar de que la Suprema Corte de Justicia ha emitido hasta el día de hoy una serie de amparos a favor de la comunidad indígena y ordenado corregir las deficiencias, la ex alcaldesa y ahora candidata por la Ciudad de México, Clara Brugada hizo caso omiso de las resoluciones durante su gestión, amparada por los señalamientos del Presidente López Obrador que ha acusado de conservadores y corruptos a los órganos de impartición de justicia.
Este conflicto entre la alcaldía Iztapalapa cuando Clara Brugada fue alcaldesa y los grupos originarios de Culhuacán va mas allá de una cuestión administrativa, pues ante su omisión como funcionaria pública corre el riesgo de que su trayectoria política y su candidatura por la Jefatura de Gobierno se vean frustradas, pues de emitir un fallo la Suprema Corte de Justicia podría inhabilitar a la candidata hasta por diez años, renunciando entonces a todos sus anhelos por encabezar los destinos de la Ciudad de México.