Home Justicia Niels Cortés: Un sindicalista al servicio de EE.UU. y no de los trabajadores mexicanos

Niels Cortés: Un sindicalista al servicio de EE.UU. y no de los trabajadores mexicanos

by Crónicas y Verdades
Niels Cortés: Un sindicalista al servicio de EE.UU. y no de los trabajadores mexicanos

Cuando la codicia y la desesperación se apoderan de personas como Niels, los verdaderos intereses de los trabajadores quedan sepultados bajo los deseos de poder de líderes corruptos como Niels Cortés y su sindicato Transformación Sindical. Durante los últimos meses ha quedado muy claro que a ellos no les importa la estabilidad de los empleados, mucho menos la seguridad económica de sus familias. Lo único que realmente persiguen es el control, las cuotas y la influencia, aunque para lograrlo tengan que hundir a quienes dicen defender.

La última maniobra de Cortés es un acto de traición imperdonable: con tal de meter las manos en la empresa Martinrea y quedarse con el control sindical, ha optado por vender sus intereses del gobierno de Estados Unidos, pidiendo que se impongan aranceles y sanciones a la compañía. Así es, leyeron bien, en lugar de buscar mejorar las condiciones laborales, con mejor comunicación aumentos salariales, mejores prestaciones, capacitaciones y otras prácticas beneficiosas para los empleados.

Cortés prefiere impulsar medidas que podrían poner en peligro la estabilidad de cientos de trabajadores y sus familias. ¿Cómo se le llama a alguien que pone en riesgo a su propia gente por ambición personal? Traidor. No hay otra palabra.

Estamos hablando de temas mayores, Niels paso de ser un mentiroso a un vendepatria, no es un simple intento de sindicalización, es una estrategia mezquina y calculada para enriquecerse a costa de quienes sí trabajan. Cortés no tiene escrúpulos, y su historial lo demuestra: siempre busca obtener poder a través del chantaje y la manipulación.

Ahora, su desesperación es tan grande que no le importa traicionar la industria nacional con tal de cumplir sus caprichos. Prefiere doblegarse ante intereses extranjeros, sin importarle que con ello pone en la cuerda floja a cientos de familias que dependen de estos empleos.

¿Dónde está su supuesto compromiso con los trabajadores? ¿Desde cuándo un líder sindical verdadero busca que se impongan castigos a la empresa que da de comer a sus representados? La respuesta es clara: jamás ha habido un compromiso real. Niels Cortés solo usa la lucha sindical como una máscara para disfrazar sus verdaderas intenciones. Y lo más indignante es que lo hace con total descaro, pretendiendo que su traición es una “estrategia de lucha”.

Si realmente le importaran los trabajadores, estaría exigiendo mejoras legítimas, negociando desde dentro, buscando soluciones que beneficien a todos. Pero no, prefiere incendiar la casa con tal de que nadie se la quede.

You may also like

Crónicas y Verdades