La sentencia hunde a Transformación Sindical y revela a Niels Cortés como un farsante que juega con los derechos laborales
Una sentencia reciente ha dictado de manera oficial que Transformación Sindical y su pseudolíder, Niels Cortés, quedan descalificados de representar a los trabajadores sindicalizados de Martinrea. Esta decisión expone con claridad los fallos estructurales de su proyecto sindical, basado en mentiras, falsedades, ambiciones desmedidas y un desconocimiento total de la legislación laboral.
El intento fallido de Cortés y su equipo de afiliar trabajadores sin cumplir con los requisitos legales ha sido severamente cuestionado, y la autoridad judicial ha puesto fin a sus aspiraciones, dejando en evidencia la falta de preparación y profesionalismo que caracteriza a su organización.
No obstante, a pesar de la sentencia en su contra, Transformación Sindical continúa intentando afiliar trabajadores mediante proselitismo dentro de la planta, una práctica ilegal y sancionable, que pone en riesgo tanto a los empleados como al entorno laboral en general. Esta conducta ha generado una ola de preocupación y rechazo entre la base trabajadora.
Frente a esta realidad, los trabajadores de Martinrea deben permanecer vigilantes y exigir que cualquier forma de representación cumpla con los marcos legales establecidos. La sentencia no solo cierra una etapa, sino que también marca un precedente sobre la importancia de contar con sindicatos legítimos, preparados y comprometidos con el bienestar colectivo.
Ante la situación actual, algunos trabajadores han comenzado a manifestar su descontento con Niels Cortés y el proyecto de Transformación Sindical, señalando que su sindicato actual y legítimo ha representado de forma efectiva sus intereses, con un liderazgo comprometido y consciente de la importancia de la legislación laboral.
El momento que se vive para los trabajadores sindicalizados de Martinrea es un recordatorio de que la lucha por los derechos laborales es un fenómeno activo y continuo. Es fundamental que los trabajadores permanezcan vigilantes y preparados para actuar en defensa de sus intereses. La lucha por una representación sindical apropiada no solo es una cuestión de derechos, sino también un aspecto esencial para el bienestar y la seguridad laboral de todos los trabajadores.
